ENTREVISTA A VICENTE MARTÍNEZ LÓPEZ, VICEDIRECTOR DEL CENTRO DE EDAFOLOGÍA Y BIOLOGÍA APLICADA DEL SEGURA (CEBAS-CSIC)

ENTREVISTA A VICENTE MARTÍNEZ LÓPEZ, VICEDIRECTOR DEL CENTRO DE EDAFOLOGÍA Y BIOLOGÍA APLICADA DEL SEGURA, CEBAS-CSIC

 

Profesor de Investigación y Vicedirector del Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS-CSIC) en Murcia. Director del Departamento de Nutrición Vegetal. Ha sido responsable de más de 45 proyectos (europeos, nacionales, regionales y contratos con empresas). Ha sido co-autor de más de 140 artículos publicados. Su interés científico a lo largo de su carrera ha estado centrado en el estudio de la nutrición vegetal bajo estreses abióticos. En los últimos años se ha centrado en la mejora de la calidad y producción hortícola en cultivos protegidos mediante la aplicación de tecnologías de la información y las comunicaciones (TIC) y en el desarrollo de nuevos sistemas de cultivos sostenibles (sin suelo, hidropónicos, verticales, de interior etc.).

Habéis venido a la Delegación del CSIC en Bruselas para presentar los resultados del proyecto LIFE: “Drainuse. Reutilización de los drenajes en cultivos sin suelo. De sistemas abiertos a sistemas cerrados”. ¿Nos puedes resumir brevemente el objetivo del proyecto, características del consorcio y resultados obtenidos?

El proyecto busca ofrecer soluciones a los agricultores para reducir los drenajes de los cultivos sin suelo, o hidropónicos, bajo invernadero. El principal reto es disminuir el impacto ambiental de la actividad agrícola y mejorar el uso eficaz del agua. En este proyecto hemos conseguido desarrollar un prototipo que permite transformar cualquier sistema abierto en sistema cerrado. El sistema es modular y escalable por lo que puede adaptarse a la mayoría de las explotaciones agrícolas de cultivos sin suelo. aprovechar mejor un recurso, el agua, que es cada vez más escaso en el campo murciano. Este proyecto lo ha coordinado el CEBAS-CSIC, y han participado la facultad de Ingeniería Informática de la Universidad de Murcia, la empresa Riegos y tecnologías SL (RITEC) y la Federación de Cooperativas Agrarias de la Región de Murcia (FECOAM). En los ensayos agronómicos realizados durante la ejecución del proyecto hemos conseguido reducir el vertido de fertilizantes casi un 60% y un ahorro de agua de casi el 40%. Esto en términos de impacto ambiental y huella de carbono son resultados muy significativos.

Ahora que el proyecto ha llegado a su fin, ¿habéis pensado solicitar de nuevo financiación al programa Life o a otros programas europeos?

Sí, de hecho, estamos iniciando otro proyecto del Programa LIFE (LIFE OLEA REGENERA) recién aprobado, estamos esperando la resolución de la convocatoria del programa PRIMA sección 1, y actualmente estamos trabajando en la presentación de un nuevo proyecto PRIMA.

Como nos cuentas, habéis conseguido un prototipo que facilita la conversión de sistemas abiertos contaminantes a sistemas cerrados con recirculación y la empresa RITEC (www.ritec.es) está en la fase de estudio de la comercialización. ¿Cuáles crees que serán los principales obstáculos con los que os podéis encontrar? Y al contrario, ¿qué es lo que consideráis “más  vendible”?

El principal obstáculo actualmente para transformar estos sistemas de producción es que la decisión es voluntaria y es necesario realizar una pequeña inversión. Pienso que a corto y medio plazo esta reconversión será obligatoria y gracias a este proyecto, RITEC está preparada para poner en el mercado un producto robusto y a precio altamente competitivo. Durante estos años, RITEC ha ido solucionando los problemas técnicos que han ido surgiendo, por lo que actualmente está en disposición de dar soluciones personalizadas a las diferentes explotaciones agrícolas de sistemas sin suelo.

¿Nos puedes explicar brevemente qué significa pasar de sistemas abiertos a cerrados, y qué consecuencias/impacto medioambiental tiene uno u otro tipo de sistema?

En los sistemas de cultivos sin suelo donde el soporte para las raíces suelen ser sustratos (perlita, fibra de coco, lana de roca, etc.), un buen manejo de la fertirrigación exige mantener la salinidad del sustrato por debajo de ciertos niveles para no afectar los rendimientos de los cultivos. Esto lleva consigo la necesidad de regar en exceso con un porcentaje de drenaje significativo. Éste suele variar entre el 20 y 50 % en función de la calidad del agua y las condiciones climáticas. Este drenaje es rico en nitratos y fosfatos y en sistemas abiertos termina en el suelo, que puede llegar a acuíferos subterráneos o a lagos. Lo cual puede tener un fuerte impacto ambiental. En un sistema cerrado recuperamos ese drenaje y después de ajustarlo volvemos a utilizarlo para el riego. Normalmente este ajuste implica la desinfección, el control de la salinidad total y la formulación de los nutrientes.

Los productos que se beneficien de la implantación de este sistema cerrado podrían tener un sello específico como “producto sostenible” por ejemplo. ¿Qué nos puedes contar sobre este tema? Y por otro lado, ¿Afectaría este sello o etiquetado a su precio final?

Este punto está contemplado dentro de un informe, donde se desarrollan diferentes sugerencias a las autoridades, para promover e incentivar la transformación de sistemas contaminantes a sistemas más sostenibles.  Este sello o etiqueta no debería encarecer el producto, pero daría cierta ventaja comercial a la marca que lo llevara. El consumidor cada día está más concienciado y no solo exige calidad en lo que compra, sino que se preocupa de si la manera de producirlo es respetuosa con el medio ambiente o no.

Habéis logrado que, con las recomendaciones dirigidas a las autoridades de la Región de Murcia, se hayan tomado medidas extraordinarias para la sostenibilidad del Mar Menor. Explícanos por favor la relación de este proyecto Life con el Mar Menor:

Durante el desarrollo del proyecto hemos estado en estrecha relación y hemos informado de los progresos del proyecto a las autoridades Regionales y a los responsables de la Consejería de Agricultura y Medio ambiente de la Región de Murcia. Como es sabido en los últimos años se ha agravado el problema de eutrofización en un ecosistema de gran valor ecológico y socio-económico como es el Mar Menor, en la Región de Murcia. A este problema podría haber contribuido la actividad agrícola de las zonas colindantes. Hace unos meses se publicó una ley donde se prohibía taxativamente el uso de abonos de alta solubilidad en sistemas de cultivo sin suelo en 3 zonas adyacentes al Mar Menor, permitiendo el uso de estos fertilizantes solo en sistemas cerrados con recirculación. Pensamos que el hecho de haber demostrado que los sistemas cerrados son viables técnicamente y financieramente, pueda haber contribuido a esta decisión de las autoridades.

A nivel europeo, se trata éste de un problema del área mediterránea, siendo más grave en el norte del África. ¿Cuáles son los principales retos? Y ¿Qué solución propondrías a corto y medio plazo?

Realmente no es solo un problema restringido al área mediterránea. Holanda ha sido el primer país que ha legislado para evitar el vertido de drenajes debido a los problemas de contaminación. Creo que será necesario, en primer lugar, concienciar a la sociedad de este problema e informar a las autoridades que existen soluciones técnicas y deben legislar y prohibir el vertido de drenajes contaminantes. Esto debería ir acompañado de políticas de ayuda que faciliten la transición de los sistemas de producción contaminantes a sistemas sostenibles.

Una pregunta fácil para el final. Si estuviese en tu mano elaborar el próximo programa marco europeo de investigación e innovación, ¿qué suprimirías? ¿Qué añadirías?

No tengo información suficiente para contestar esta fácil pregunta, pero sin duda pienso que se debería seguir apostando por el desarrollo de sistemas de producción agrícola sostenibles y compatibles con la seguridad alimentaria, ya que habrá que garantizar alimentos de calidad para todos en las próximas décadas.